Una vida cuyo último y único sentido consistiera en sobrevivir o sucumbir, una vida por tanto cuyo sentido dependiera en última instancia de la casualidad, creo que no merecería la pena en absoluto de ser vivida. La vida debería ser vivida con objetivos, metas, realizaciones, lograr un sueño, alcanzar una meta, realizar mis deseos para pasar luego a otro, solo así tendría sentido para mi levantarme para enfrentar otro día cualquiera, a veces deseando mas que teniendo, pero al fin y al cabo a mi me mantienen vivo mas mis sueños que mis logros y no es una queja, amo mi vida y mi realidad, creo que todo es un enorme rompecabezas que se viene armando desde que nací, se que no estoy aqui por casualidad, soy la consecuencia literal de mis propositos, a veces me angustia un poco la espera, pero soy asi, quizas sea un condenado a mirar mas hacia el horizonte que al sol que me alumbra; no se, asi me siento hoy...
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario